Google está cambiando su estrategia para Android, en un intento por crear un frente unido junto con los fabricantes de smartphone y tabletas para competir con rivales como el Apple y evitar que los operadores ejerzan control sobre los dispositivos añadiendo otra capa o capando aplicaciones que hace que varíe la experiencia del usuario.
Google planea dar a múltiples fabricantes de terminales móviles un acceso anterior a las nuevas versiones de Android y vender esos dispositivos directamente a los consumidores, este es un gran cambio ya que antes solía hacerlo con un único fabricante.
El plan también tiene como objetivo mitigar las preocupaciones de los fabricantes de hardware que se basan los dispositivos que utilizan Android, muchos de los cuales desconfían de Google debido a su adquisición de Motorola.
Esta nueva versión que sería Android 5.0, está apodada como Jelly Bean se espera a finales de este mismo año, quizás algo apresurado teniendo en cuenta que la versión Ice Cream Sandwich de Android no ha aterrizado del todo (tiene apenas una penetración del 5%).Llegará al consumidor final sin intermediarios, mediante venta directa, a través de su Google Play Store.
Según el diario estadounidense, Google estaría intentando cerrar acuerdos con cinco fabricantes para lanzar dispositivos Nexus (de tablets y smartphones). Según la fuente consultada serán terminales libres tendrán un precio entre 150 y 200 dólares (a pesar de que el Samsung Galaxy Nexus cuesta ahora 400 dólares).
Evitar a los operadores puede beneficiar a Google, ya que algunos de ellos bloquean apps. Es el caso de Verizon, que no permite la aplicación Google Wallet en el Galaxy Nexus, según The Wall Street Journal.